• Quince mil jóvenes congregados en Bkerke, cerca de Beirut y frente al patriarcado maronita, vivaron al anochecer al pontífice en la última congregación pública de la jornada.
  • Les recordó “la historia del Líbano tejida de páginas gloriosas pero también marcada por heridas profundas que tardan en cicatrizar”.

Quince mil jóvenes congregados en Bkerke, cerca de Beirut y frente al patriarcado maronita, vivaron al anochecer al pontífice en la última congregación pública de la jornada.Les recordó “la historia del Líbano tejida de páginas gloriosas pero también marcada por heridas profundas que tardan en cicatrizar”.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *